Crónica del partido
Liga de Portoviejo
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Los jugadores del Macará celebraron el empate en Portoviejo como un triunfo. Foto: Macará

Los jugadores del Macará celebraron el empate en Portoviejo como un triunfo. Foto: Macará

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28 de septiembre de 2020 20:35

Macará se llevó otro empate de último minuto, esta vez fue en Portoviejo

Fabián Alarcón

Luego de una serie de insultos, patadas, gritos y faltas reiteradas, Macará se llevó un agónico empate del estadio de Liga de Portoviejo 2-2, la noche de este lunes 28 de septiembre del 2020. Así se cerró la fecha 14 del torneo LigaPro. 


Los locales se imponían a los celestes 2-1 en el estadio Reales Tamarindos. El elenco manabita ha vivido una primera etapa con altibajos. Y como ha sido habitual, otra vez cedió puntos con sufrimiento al conjunto celeste. Francisco Fydriszewski y Vinicio Angulo, en los minutos 14 y 22 marcaron para los locales. Sin embargo el descuento Ronald Champang (38') dio vida a los guaytambos.


Liga arrancó el cotejo con la iniciativa, sin ese aire especulativo que suele ser una marca del DT Rubén Darío Insúa. Aunque, los ambateños también llegaron al Reales Tamarindo con ambición de triunfo. Por ello el ritmo del encuentro fue emotivo, con peligro en ambos pórticos. 

Tras los tantos de Fydriszewski y Angulo en rápidas salidas, Macará encontró el gol que lo motivó a buscar la  igualdad durante el resto del partido. Así se adueñó del balón, pero sufrió en la defensa con los veloces contragolpes que gestaron los manabitas, un sello de Insúa. 

Al final, los jugadores de Liga de Portoviejo cayeron en el juego brusco, faltas, agravios e insultos para generar que el tiempo corriera a su favor. Por ello, los locales terminaron con 10 hombres tras la expulsión de Fydriszewski, por reclamar al árbitro de forma grosera.

Estas provocaciones le jugaron en contra a los universitarios, que se desconcentraron y así recibieron el tanto de la igualdad de Macará. Braian Molina remató con fuerza desde fuera del área tras un tiro libre. 

Así, los celestes repitieron lo ocurrido con Barcelona en Ambato (1-1), cuando caían 1-0, pero un gol de último minuto de Leonel Quiñónez le arruinó la fiesta a los canarios.