Gustavo Alfaro y su equipo técnico fortalecen la convivencia de la Tricolor

¿Cómo es el ambiente en la Tricolor? Hay armonía, optimismo, los jugadores se llevan bien y sobre todo hay ‘hambre de gloria’.

La convocatoria de Byron Castillo también ha sido otro de los ‘plus’ que ha reforzado la convivencia en la Selección, que hoy (16:00) juega contra Paraguay, en el estadio Rodrigo Paz Delgado.

Gabriel Wainer, secretario técnico de las selecciones, lo corrobora. Dice que los jugadores ya están recuperados de ese traspié con Perú, por la eliminatoria. “En esa ocasión quedaron desanimados. Y allí el entrenador Gustavo Alfaro tuvo que hacer un trabajo clave que se reflejó en la Copa América, donde mostraron una fortaleza anímica”, agrega.

La convivencia en estos días de concentración es buena en la Casa de la Selección. La mayoría se conoce porque se enfrentaron por el torneo local, también porque convivieron en selecciones juveniles.

Atrás quedaron los cuestionamientos de Cristhian Noboa al estratega por alinear a jugadores que eran suplentes.

El extremo de Barcelona, Byron Castillo, fue bien acogido por la plantilla. Él fue compañero de Félix Torres, Xavier Arreaga, Leonardo Campana en su equipo. Uno de sus amigos más cercanos es Pervis Estupiñán, a quien conoce desde que era un adolescente.

“Desde el punto anímico hay un equipo recuperado”, agrega Wainer, brazo derecho de Alfaro en las selecciones.

Las charlas no solo han sido técnicas, en la concentración también hay espacio para conocer un poco más de los jugadores, cómo les va en sus equipos, intercambios de camisetas, las familias..., sin perder la prioridad que es el fútbol.

Pero atrás de esos jugadores hay personas. Alfaro lo reconoce de esa forma y esa es su prioridad para convencerlos que sus rendimientos siempre les servirá para mejoras personales, que repercutan en sus familias. También les suele dar consejos, como aprender otros idiomas, estudiar otras profesiones, en caso que puedan.

Y uno de los que está estudiando es Jhegson Méndez, quien juega en el Orlando City en Estados Unidos. “Él estudia ingeniería química en inglés”, revela el seleccionador.

Méndez, que se recupera de una lesión, es uno de los ejemplos que destaca el DT en la Tricolor. “Hay un grupo joven que ha ido procesando su paso en el fútbol y también una visión de lo que será su futuro”, agrega Alfaro, entrenador que también en sus ratos libres juega golf en el club Arrayanes Country Club, donde adquirió una membresía de socio.

Para fortalecer la convivencia dentro de la Casa de la Selección se han puesto afiches y también se han pintado paredes con mapas, en las que están fotos de los seleccionados actuales. Esa es una forma para que se sientan importantes, reconoce Wainer.

Alfaro y su equipo técnico ahora visitan a los seleccionados en el exterior. En agosto, Nicolás Quiesa, colaborador de la FEF, viajó a Europa para observar los entrenamientos, hablar con los futbolistas, conocer cómo se sentían, sus necesidades, desplazamientos...

Quiesa visitó a los que juegan en Europa, a excepción de Moisés Caicedo, porque no pudo ingresar a Inglaterra.

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