Byron Moreno

Byron Moreno durante el partido del Mundial entre Corea del Sur e Italia. Foto: Archivo/BF.

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19 de junio de 2022 12:37

Arbitraje polémico de Moreno cumplió 20 años

Andrés Ávila

Los octavos de final del Mundial de Corea y Japón 2002, que jugaron Corea del Sur e Italia, cumplió 20 años. Es uno de los partidos más polémicos y tiene como protagonista a un ecuatoriano.


El 18 de junio de 2002 se encontraban en la ciudad de Daejeon, una de las selecciones favoritas a quedarse con la Copa del Mundo, la tricampeona (en ese entonces) Italia, contra uno de los anfitriones, Corea del Sur.

Ante casi 36 000 personas, el ecuatoriano Bryon Moreno fue el encargado de dirigir el encuentro, el cual resultó uno de los más recordados en la historia de los Mundiales.

El partido comenzó a todo motor. A los cuatro minutos, Moreno dictaminó penal a favor de los locales, por un supuesto agarrón dentro del área. Jung-hwan Ahn fue el encargado de patear la pena máxima, pero erró.


Italia se adelantó en el marcador a los 19 minutos, con anotación de Christian Vieri de cabeza.

El partido continuó sin problemas, pero con varias decisiones cuestionables por parte del colegiado, ya que los jugadores asiáticos tuvieron un juego brusco, que Moreno dejó por alto.

Cuando parecía que Italia iba a quedarse con el partido, Seol Ki-hyeon empató el cotejo a los 88 minutos. Aquí empezaría la tragedia de Italia.

Durante el minuto 90, Lee Chun-Soo le propinó una patada en toda la cabeza al defensor Paolo Maldini, que ni siquiera se pitó falta.


Ya en la prórroga, en el término de la primera parte, Byron Moreno expulsó a Francesco Totti, por una “simulación” de penal, aunque  el delantero de la Roma sí sufrió un impacto dentro del área.

Esto no terminaría aquí, ya que en la segunda mitad del tiempo extra, el ecuatoriano cortó una jugada peligrosa de gol de Damiano Tommasi por supuesta posición adelantada, sin embargo, el delantero estaba en posición lícita.


A tres minutos de que termine el partido, Jung-hwan Ahn, quien erró el penal al inicio del cotejo, anotó el gol de oro (regla válida en ese Mundial), que permitió que Corea del Sur avance de ronda.

Como dato curioso, el delantero coreano autor del gol, militaba en el Perugia de Italia, tras este suceso el propietario del club lo despidió.