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Aguinaga y Necaxa se saludan por los viejos tiempos

Alejandro Ribadeneira, 

Aniversario

Este 21 de agosto, el club mexicano Necaxa cumplió 90 años. Por eso, hubo un cariñoso y nostálgico intercambio de tuits entre la cuenta oficial de la entidad y Álex Aguinaga, uno de los mejores jugadores que pasaron por el plantel u2018rayadou2019.

Editor

 A estos tuits se unieron los de varios hinchas, quienes agradecieron a Aguinaga por las alegrías, las vueltas olímpicas y las buenas épocas. Aguinaga señaló su orgullo por haber sido parte del equipo, mientras que Necaxa dio las gracias al u2018Gu00fcerou2019 por su contribución a la gloria del club, cuyo nombre oficial es Impulsora del Deportivo Necaxa S.A. de C.V. Necaxa lleva ese nombre por el río y la presa que provee de energía a una parte de México.

Aunque se fundó en la capital, ahora la entidad tiene su sede en Aguascalientes. En su palmarés registra cuatro títulos de la era amateur y tres títulos de la era profesional. Y, curiosamente, era el equipo que mencionaba Don Ramón (Ramón Valdez) en el Chavo del 8: “yo le voy al Necaxa”.Para los ecuatorianos, durante mucho tiempo no había mejor noticia que estar pendiente de las aventuras de Aguinaga en México.

Justamente Aguinaga tuvo participación en los títulos profesionales, integró las alineaciones titulares y también estuvo en el Mundial de Clubes del 2000, en el cual Necaxa acabó en tercer lugar, con un tanto marcado por el talentoso ecuatoriano. También fue campeón de la Concacaf.

El u2018Gu00fcerou2019 llegó al equipo en 1989, tras una operación que costó USD 280 000, todo un récord para un jugador ecuatoriano en esa época. En 14 años de carrera anotó 85 goles, disputó 476 cotejos, obtuvo el premio al Jugador de Década del torneo mexicano en los 90 y Necaxa retiró el 7 en homenaje al enorme desempeño del volante ofensivo, quien en muchas ocasiones fue delantero neto.

También llamó la atención la fuerte personalidad de Aguinaga, que era amado por los hinchas y respetado por los analistas, aunque también mantuvo controversias, como aquella con Hugo Sánchez.

Desde que sus caminos se separaron, Necaxa no ha podido ser más el equipo ganador de los 90. Más bien, se fue al descenso una vez y ahora intenta retomar el protagonismo.

A Aguinaga le ha ido mejor, pues fue campeón con Liga de Quito en el 2005 (algo que aún saca ronchas a los hinchas del Deportivo Quito, el club de sus inicios) e intenta consolidar su carrera como entrenador, tras pasar por Barcelona de Guayaquil; ahora busca rescatar a Liga de Loja del descenso.

Aguinaga dio sólidos pasos para ser dirigente, pero pudo más el magnetismo de estar en la cancha que frente a un escritorio, tipeando informes. Es que el fútbol es una religión y Aguinaga le sigue siendo fiel.