El juez Roddy Zambrano recibió reclamos por haber anulado un gol a Deportivo Cuenca y en el camerino tuvo problemas con el presidente del equipo. Foto: API

El juez Roddy Zambrano recibió reclamos por haber anulado un gol a Deportivo Cuenca y en el camerino tuvo problemas con el presidente del equipo. Foto: API

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22 de septiembre de 2016 12:18

El réferi Zambrano detalló que hubo insultos e intento de agresión del presidente del Cuenca

Manuel Quizhpe

Roddy Zambrano, árbitro que dirigió el partido entre Delfín y Deportivo Cuenca el 21 de septiembre, en Portoviejo, dijo en su informe que el presidente del Deportivo Cuenca, Galo Cárdenas, lo insultó y le dijo: "ladrón hijo de p…, árbitro corrupto".


Así lo dio a conocer en el informe arbitral que entregó al inspector del partido, que consiguió este Diario.

En el informe del réferi con carné FIFA, respecto a los incidentes ocurridos en la parte baja del estadio Reales Tamarindos de Portoviejo tras el empate 2-2 entre los conjuntos manabita y cuencano.

El informe del árbitro Roddy Zambrano contrasta con las versiones del presidente del club azuayo, Galo Cárdenas. Esto es lo que puso en la hoja membretada de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF):

“Finalizado el partido se acerca a la puerta del camerino de árbitros, el señor Galo Cárdenas, presidente del equipo Deportivo Cuenca e intenta agredirme y me insulta diciendo: ladrón hijo de p…, árbitro corrupto, que fue controlado inmediatamente por la fuerza pública y los señores de seguridad”.

En cambio, Cárdenas, según él, se enfadó con el árbitro por anular la jugada que terminó en gol del defensa argentino Juan Pablo Segovia, al minuto 52. Al parecer, el juez no validó el tanto por considerar que hubo una supuesta falta.

Cárdenas, en entrevista con radio La Voz del Tomebamba de Cuenca, contó que “le dije que es un mamarracho, y el árbitro en seguida se dio la vuelta y me escupió”. También sostuvo que Zambrano “hizo ademanes para pelear y yo lastimosamente caí en esa provocación”.

Aparte de la anulación de la jugada del gol, que significaba el 2-1 a favor del conjunto colorado, lo que le molestó a Cárdenas es “la actitud prepotente del árbitro, amenazando a nuestros jugadores con expulsarlos”. El dirigente reconoció que “hubo intercambio de golpes”.

Esto último no aparece en el informe de Zambrano.

Este viernes 23 de septiembre del 2016 se analizará citado informe por parte de la Comisión Disciplinaria de la Ecuafútbol, en una reunión que habrá en Guayaquil.

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