Histórica asistencia en Cuenca para una final de fútbol femenino
Con banderas, globos y camisetas rojas, miles de hinchas cuencanos se apoderan del estadio Alejandro Serrano Aguilar. Allí, desde las 19:00 de este sábado 28 de septiembre del 2019, se juega la gran final de la SuperLiga Femenina de Fútbol entre Deportivo Cuenca y Ñanas de Quito.
Las puertas del escenario se abrieron a las 16:30. Nunca antes ocurrió algo parecido en una final del fútbol femenino de Ecuador. Esa afirmación la hizo Wendy Villón, quien ha dirigido cinco finales nacionales en el país y todas las ha ganado. Con el conjunto colorado será su sexta final como estratega.
Algo que no ocurre con los partidos del fútbol profesional masculino: familias completas, con niños en brazos de sus padres, copan las gradas de general, preferencia, tribuna y palco. El ambiente fue de fiesta, dentro y fuera del escenario. El clima también es bueno, aunque el frío fue inevitable.
El propio entrenador de Ñañas, Francisco Ramírez, quien también tiene experiencia dentro del fútbol femenino, calificó como histórica la respuesta de los aficionados cuencanos. "Esto ocurre solo en Colombia, que nos saca muchos años de ventaja", aseguró.
Los propios jugadores del plantel masculino del Deportivo Cuenca, que un día antes ganaron 3-0 a Fuerza Amarilla, se mostraron gratamente sorprendidos con la presencia del público.
El arquero Brian Heras y otros futbolsitas llegaron con más de dos horas de atención al estadio y fueron entrevistados por los reporteros radiales sobre la gran final femenina.
