Jonathan de la Cruz (der.) contiene el balón en el estadio Bellavista. Él marcó un gol. Foto: Glenda Giacometti / BF

Jonathan de la Cruz (der.) contiene el balón en el estadio Bellavista. Foto: Glenda Giacometti / BF

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29 de mayo de 2019 21:46

Macará quedó fuera de la Copa Sudamericana ante un sorpresivo Royal Pari

Fabián Maisanche

La gente en las gradas se tomó la cabeza, no podían creer lo que veían. En el minuto 90+4', el estadio Bellavista se silenció al presenciar la eliminación del Macará ante el club boliviano Royal Pari, que cayó 3-2, pero que con los goles de visitante avanzó en la Copa Sudamericana.


El elenco del Altiplano tuvo mucha fortuna en un partido extraño, cargado de emociones inesperadas ante más de 12 000 hinchas presentes en el escenario ambateño. 

Los celestes perdieron en la ida 1-0, en un cotejo en el que también dominaron a su rival, pero que no lograron concretar las múltiples opciones que generó. Ahora, en la revancha, pasó prácticamente lo mismo y otra vez se vio sorprendido por este equipo novato, de solo cinco años de existencia. 

Todo parecía encaminado al triunfo macareño cuando en el minuto 22, Jonathan de la Cruz abrió la cuenta de penal. Y luego, Galo Corozo marcó un golazo desde unos 25 metros en el 29', para ampliar la ventaja. Con ese marcador, bastaba para tener el boleto fijo en los octavos de final. 

Sin embargo, una desconcentración de Carlos Feraud terminó en el gol del descuento boliviano, en el minuto 34. El volante lojano se quedó reclamando por una falta y los visitantes cobraron rápido en sus narices, para el tanto de Ramiro Milano, tras un centro rasante. 

A partir de ahí, en el Bellavista todo fue angustia y desesperación. Macará necesitaba un gol más, que llegó en el 84', por intermedio del argentino Flavio Ciampichetti, quien cobró con solvencia otro penal. Previamente, el golero Jorge Arauz tuvo atajadas de lujo y errores de blooper. Además, el central anuló un gol local por fuera de juego.

Royal Parti solo atacó cuando se vio abajo en el marcador. De ahí, su propuesta ofensiva fue nula la mayor parte del cotejo. Por suerte para ellos, en el minuto 90+4, un potente remate de José Chávez terminó en el pórtico de Javier Burrai, para silenciar el estadio, generar llantos y caras tristes en jugadores, directivos e hinchas del Macará.