Carlos Torres Garcés (der.) posa junto con sus colaboradores. Foto: Club Atlético Ensenada

Carlos Torres Garcés (der.) posa junto con sus colaboradores. Foto: Club Atlético Ensenada

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1 de septiembre de 2020 15:50

Carlos Torres Garcés dejó el Atlético Ensenada por falta de recursos ecómicos

Jonathan Tamayo, para Bendito Fútbol

El entrenador Carlos Torres Garcés dejó de ser el técnico del Atlético Ensenada FC, equipo de la Liga de Balompié Mexicano, torneo de fútbol profesional paralelo a la Liga MX. El ecuatoriano ocupó el cargo desde el pasado 5 de mayo del 2020.


"Queremos agradecer ampliamente a los profesores Carlos Torres Garcés y Duffer Alman Arroyo quienes hasta hace unos momentos encabezaban el cuerpo técnico de nuestro club. Desafortunadamente nuestra relación de trabajo terminó por situaciones meramente internas", indicó el comunicado oficial del equipo azteca.

Según medios mexicanos, el estratega decidió irse del club al no existir las condiciones económicas que le prometieron a su llegada. Desde el 17 de agosto, 'El Palillo' realizó pruebas de observación a futbolistas aficionados para reforzar el plantel, ante la dificultad de contratar jugadores profesionales.

Este no es el primer conflicto entre la dirigencia y los trabajadores del club. El defensor paraguayo Blas Aguayo, quien fue separado del plantel a pocos días de firmar su contrato, denunció que el presidente Antonio García se negó a cubrir el boleto de avión para regresar a Perú, país donde radica.

Además, se registró un conflicto con Ramón Ramírez, quien renunció a su cargo como director deportivo del club luego de acusar "falta de profesionalismo" por parte de la directiva. El exfutbolista estuvo en el cargo desde el pasado 22 de abril y aseguró no recibir su sueldo desde esa fecha.

La institución comunicó que los mexicanos Rodolfo Montoya y José Luis Sixtos, quienes eran asistentes del DT ecuatoriano, serán los encargados de dirigir al equipo, hasta nuevo aviso. En una entrevista con AGP Noticias del pasado 24 de agosto, Torres Garcés afirmó que no tenía un contrato firmado, sino un acuerdo de palabra.