Ecuador

Los jugadores de Ecuador no hablaron con la prensa tras la humillante derrota. Foto: Paúl Rivas /BF

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1 de septiembre de 2016 19:00

El 1x1 de los tricolores luego del papelón ante Brasil

Alejandro Ribadeneira

Estas son las calificaciones que se merecen los jugadores de la Selección ecuatoriana, tras el baile que les hizo Brasil en la discoteca del Atahualpa y que acabó en un 3-0, que pudo ser mayor.


Alexander Domínguez, 2/10
Fatal. No hay que echarle toda la culpa del penalti, compartida con Mina. Pero en general estuvo nervioso, con un primer tiempo en que regalaba la pelota con esos absurdos saques largos que solo servían para que el rival se diera gusto. En el segundo ya jugaba desde atrás, pero ese error del penalti lo dejó mal. En el segundo gol, confió en que Ayoví se haría cargo. En el tercero, lo sobraron. Una pena.


Juan Carlos Paredes, 1/10
Poco lo de ‘La Hormiga’, aunque no es sorpresa pues no está en su mejor momento en Inglaterra. Fue toda una sorpresa que Gustavo Quinteros le ratificara la confianza, la cual no fue correspondida de ninguna manera. Se fue expulsado en el peor momento, cuando el partido estaba 1-0 y era necesario un momento de liderazgo.


Arturo Mina, 5/10
Era el mejor hombre de Ecuador en la retaguardia aunque Marcelo lo tuvo a mal traer, pero daba batalla.. hasta que en un pestañeo dejó que se le escapara Gabriel de Jesús (de hecho, Mina lo empuja hacia Dida y prácticamente deja servido el penalti) y el partido se derrumbó para siempre. Mina fue aplicado en general y sacó varias pelotas de peligro y eso mejora su nota, aunque la desazón es enorme.


Gabriel Achilier, 3/10
Curiosamente, esta vez el problema de Achilier es que no tuvo mucha participación en la zaga. Claro, Mina lo ‘marcó’ de cerca.


Walter Ayoví, 3/10
Prácticamente metió el balón en la cabaña de Domínguez tras ese toque de Gabriel Jesús, pero un atenuante es que estaba cubriendo el centro del área, zona que no estaba a su cargo. En general aportó poco y queda claro que, mientras más juegue Ayoví, menos opciones existen de que aparezca alguien por la izquierda.


Carlos Gruezo, 0/10
Es el Papá Noel de la Tricolor: no existe.


Christian Noboa, 5/10
Luchó hasta donde le dio el aire. Tuvo una opción de gol en el primer tiempo pero prefirió rematar, ya sin fuerza, en lugar de cederle la pelota a Felipao. En el segundo tiempo se borró. Una prueba de que la altitud de Quito también perjudica a Ecuador.


Enner Valencia, 1/10
Nada parece detener el declive de Enner en la Tricolor. Esta vez pasó desapercibido, anulado totalmente como puntero, sin la capacidad de disparar ni de desmarcarse. ¿Qué ha pasado con Enner?


Jefferson Montero, 4/10
Se mostró activo en el primer tiempo y mostro pinceladas de su típico juego: driblar, ganar la raya de fondo y centrar. Pero, a diferencia de lo que hace en el Swansea, no fue peligroso ni determinante, por la falta de juego asociado. Decayó en el segundo tiempo hasta el punto en que fue un dique abierto por su zona.


Miller Bolaños, 1/10
Pasado de revoluciones en unos momentos, sin sentido de la marca en otros, desbordado tristemente en otros. Tuvo, eso sí, un estupendo remate que el arquero rival atajó con una gran estirada. Pero nada más.


Felipe Caicedo, 1/10
Qué lejos está Felipao del jugador que hizo delirar a los hinchas en Buenos Aires. Le pesó la altitud de Quito pero también el planteamiento táctico, que lo dejó con mucha responsabilidad sin un enlace con oficio.


Renato Ibarra, Michael Arroyo y Fernando Gaibor, sin nota
Entraron para recomponer algo que no tenía salvación. Son víctimas.


Gustavo Quinteros, 0/10
El peor partido de Quinteros del año. El peor de todas las eliminatorias. El peor de Ecuador desde la derrota con Suiza. El DT Tite le dio una pequeña lección de cómo parar un equipo mientras se realiza una renovación. Mientras Brasil era una mezcla de valores probados con sangre fresca, Quinteros puso un equipo desconcertante en que varios jugadores no juegan en sus clubes. Apostar por un suplente es legítimo, pero no puede ser que medio equipo sea alternante. Para colmo, Brasil corrió más que Ecuador y alcanzó un triunfo inédito. ¡Tres goles a Ecuador en el Atahualpa! Otra lección: hay que respetar a Brasil, que afrontó el duelo en Quito con profesionalismo.