España tuvo mejor rendimiento y juego limpio ante Croacia
La victoria de España contra Croacia en los octavos de final de la Eurocopa 2020 recorrió cada sector del terreno de juego y cada estadística, porque dio más del doble de pases, con un total de 820, manejó la posesión con rotundidad, apenas cometió 10 faltas y, sobre todo, corrió 17,6 kilómetros más que su adversario, al que doblegó por 3-5 en Copenhague.
Hasta los 146.200 metros alcanzó la selección española durante los 129 minutos de encuentro en el estadio Parken de Copenhague; una marca que sólo ha superado hasta ahora Italia en esta edición del torneo, con 149,393 kilómetros en su duelo de octavos que también se decidió en el tiempo extra ante Austria en el estadio de Wembley.
Los 146,2 kilómetros retumban aún más en la comparación con su oponente, Croacia, que se quedó en 128,6, según recogen las estadísticas oficiales de la UEFA; una diferencia tan amplia como impactante de 17,6 kilómetros que también reproduce la superioridad con la que España desplegó su presión y su posesión todo el choque.
También completó más del doble de pases que Croacia, además en baremos altísimos como suele tener España, que conectó mediante esta destreza en 820 ocasiones por las 324 de su contrincante, al que rebajó hasta apenas un 83 por ciento de acierto en sus envíos por la presión alta y asfixiante que ejerce el equipo de Luis Enrique.
Al revés, España logró un 91 por ciento de certezas en los envíos entre sí, más que en los otros tres encuentros precedentes en el torneo, cuando logró un 89 por ciento ante Suecia y Eslovaquia y un 88 contra Polonia.
A la vez, individualmente, diez de los 17 jugadores empleados por el técnico a lo largo del partido rebasaron el 90 por ciento: el portero Unai Simón (90%); los defensas Eric García (98%), Aymeric Laporte (93%) y José Luis Gayá (92%); los centrocampistas Sergio Busquets (92%), Koke Resurrección (93%) y Pedri González (95%), entre los once titulares, y Pau Torres (92%), Rodrigo Hernández (93%) y Fabián Ruiz (91%), entre los seis recambios utilizados.
La diferencia de la posesión de balón, con un 36 por ciento del conjunto balcánico y un 64 por ciento de España, también reafirmó la superioridad de la selección española, que lanzó casi el doble de tiros entre los tres palos: de los seis de Croacia a los seis suyos.
