Chilavert se plantea ser presidente de la Conmebol o de Paraguay
Dueño de un potente remate de pierna izquierda que lo llevó a convertir más de 50 goles de pelota parada, el paraguayo José Luis Chilavert marcó un antes y un después en la historia del fútbol. Ahora se plante presidir la Conmebol, incluso su país.
Alejado de las canchas tras su retiro en 2004, el exportero del Vélez Sarsfield argentino y el Real Zaragoza español, entre otros equipos, visitó Uruguay para una acción solidaria en el Colegio Español Cervantes de Montevideo. Allí conversó de muchos asuntos, entre ellos su deseo por presidir la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) o, más importante aún, su país a partir de 2023.
¿Hay un antes y un después de Chilavert en el fútbol?
Creo que he dejado un legado en el mundo del fútbol, en la manera de poder ganar un partido. Hoy en día es muy difícil encontrar un arquero que pueda influenciar en el rival y también en el sistema. Cuando yo jugaba, los técnicos les decían a sus jugadores: por favor no hagan faltas al borde del área, porque enfrente tenemos a Chilavert. Hoy en día es muy difícil que un arquero pueda tener esa relevancia.
¿Le quedó alguna espina clavada?
No haber salido campeón del mundo con Paraguay. Yo creo que el equipo de Francia 1998, si hubiésemos tenido un poco de fortuna podíamos llegar mucho más lejos.
Estuvieron cerca de hacer historia allí..
Cuando llegamos a Francia, los franceses no sabían de dónde éramos, nos preguntaban de qué país y le decíamos: de Paraguay. Le dibujaba que estamos en el corazón de América del Sur. Después de ese partido, los franceses saben dónde está ubicado Paraguay, porque les dimos guerra hasta el final. Cuando faltaban cinco minutos para ir a los penales, los fanáticos franceses se iban del estadio, no los querían ver.
¿Le gustaría volver a la selección paraguaya en algún cargo?
Algún día puede ser mánager, no lo descarto, pero seguramente pronto el mundo del fútbol va a tener una noticia buena para poder transparentar el fútbol en Sudamérica, sería muy importante la unión y que todos los presidentes de cada país puedan juntarse y resolver entre todos, porque hoy en día el fútbol sudamericano está manejado por personajes nefastos, que matan al fútbol.
¿Ocuparía un cargo como dirigente?
En el mundo del fútbol me metería apuntando a ser presidente de la Conmebol o a ser presidente de mi país en 2023.
¿Le gustaría ser presidente de Paraguay?
A cualquier persona le encantaría ser presidente de un país. Obviamente hay que ver cómo cae la figura de uno a la gente, hay que hacer encuestas, resolver que la política no es fácil. Sí está claro que no me gustaría que mi país cayese en manos del populismo, como pasa en Venezuela y puede pasar en la Argentina. Sería una pena que Argentina volviese al populismo.
¿Opta por alguno de los dos cargos?
Puede ser la presidencia de mi país o la Conmebol, me tengo que decidir por uno o por otro. Lo diré en el momento, hoy en día es un 50-50. Yo sé lo que es mi imagen en mi país, yo sé lo que puedo dar, pero hay que buscar un equipo ideal y eso es lo que es difícil dentro del mundo de la política, tener hombres leales.
Jugó en Argentina, Paraguay y Uruguay, tres países que piensan formar parte de la organización de un Mundial en 2030. Qué le parece ese torneo?
Yo estoy en contra del Mundial 2030 organizado por mi país, yo te puedo hablar de mi país. Yo prefiero que en Paraguay construyan hospitales, carreteras y escuelas. Creo que hay muchas cosas más importantes que organizar una Copa del Mundo. Yo prefiero gastar ese dinero en educación y salud y no en hacer un partido de fútbol.