Roberto Garcés (der.) durante un entrenamiento junto a Alejandro Villalva

Roberto Garcés (der.) durante un entrenamiento junto a Alejandro Villalva. Foto: Julio Estrella

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5 de septiembre de 2018 12:23

Roberto Garcés rescindió un contrato que lo vinculaba por cinco años

David Paredes

Roberto Garcés tiene sentimientos encontrados. Por un lado, el mediocampista de El Nacional quiere quedarse, pero -por otro lado- está algo inconforme con los incumplimientos de la dirigencia. Por eso, ya tomó una decisión: la semana pasada firmó un nuevo contrato que lo vincula al Bitri solo hasta finales de esta temporada. Después, podrá buscar equipo o analizar propuestas. 


​"Por ahora estoy concentrado en terminar bien el año. Quiero, al menos, dejar al equipo en un torneo internacional"
, dice el 'Gato', quien a finales del 2017 ya hizo un primer sacrificio por amor al cuadro militar. Garcés prefirió renovar contrato con El Nacional, que lo ilusionó con la posibilidad de comprar su pase, que ir a uno de los clubes del Astillero, donde iba a ganar el doble.


"Yo ya hice un sacrificio a inicios del año para quedarme en el club. Me voy porque la dirigencia no cumplió con lo que prometió del contrato. No pagaron unas letras de la opción de compra", asegura el quiteño de 25 años.


Néstor Landeta, gerente de El Nacional, habló sobre la posibilidad de renegociar con el capitán del Bitri
y con Miguel Parrales, quien tomó la misma determinación. Ante esto asegura que ellos firmaron un nuevo contrato y que ya no hay marcha atrás.


Tito Manjarrez, presidente del club, fue claro al decir que no hay recursos para responderle a sus dos jugadores. Afirma que se hizo un esfuerzo para renovarles el fichaje y que se proyectaron a pagar lo que estipulaba el contrato con los ingresos de este año.


"Se nos agotaron los recursos. Esa es la realidad y no hay que estar mintiendo. Desgraciadamente, no logramos reunir los fondos suficientes para comprar los pases. Fuimos más allá de lo que nos permitía la realidad del club", agrega el máximo dirigente de los puros criollos.


Para Garcés, la decisión está tomada. Aunque no descarta sentarse a finales del año a renegociar. Quiere quedarse, porque antes de ser jugador del Rojo era hincha. Su sueño era ser jugador profesional del equipo de Tumbaco.


"Rescindir el contrato fue lo mejor que se pudo hacer para las dos partes. Lamentablemente, ellos no cumplieron su parte del trato. Eso sí, no cierro las puertas de este club. Quien quita que el otro año pueda continuar aquí en el equipo", dice el 'Gato'.


Pero para que esto suceda la oferta del equipo debe mejorar. Garcés está dispuesto a conversar siempre y cuando lo que le ofrezcan supere al acuerdo inconcluso anterior.


"Ya sacrifiqué una importante parte económica. Ya es momento que ellos hagan su gestión", asegura el capitán. Eduardo Favaro prefiere tratar el asunto con pinzas. Cree que eso es un tema estrictamente dirigencial, aunque se molestó por la falta de compromiso de los que comandan el club.


"No podemos retener jugadores. Eso demuestra cómo está el equipo", dice el uruguayo. Y sí que la ha sufrido. La semana pasada fue un baldazo de agua fría la salida de Bryan de Jesús, quien no estuvo ni un mes en la plantilla. Ahora con la noticia de la rescisión de contrato del 'Gato' y Parrales todo se pone cuesta arriba.


El cuerpo técnico charrúa los tenía entre sus planes para el próximo año. Ahora deberán trabajar con los más pelados para ver si se encuentra un reemplazo en canteras. El 'Gato' agrega que "hay que ver qué pasa conmigo. Hablé con mi familia y me dice que debo marcharme. Quiero ir a un club que tenga hinchada. Yo juego por ellos". 


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