Deportivo Cuenca depende de acreedores para jugar y no descender a la Serie B

Como ha ocurrido en los últimos meses antes de cada partido de la LigaPro, Deportivo Cuenca depende de los acreedores para poder jugar. Hasta las 18:00 de este viernes 18 de octubre de 2019 tiene plazo para pagar las deudas o arreglar con los reclamantes para que se levante la suspensión impuesta por la Comisión Disciplinaria de la Federación Ecuatoriana de Fútbol.

De lo contrario, no podrá jugar este sábado 19 de octubre ante Macará, en el estadio Bellavista de Ambato, y automáticamente descenderá a la Serie B por reincidencia. Vale recordar que, el 26 de julio del 2019 ya fue suspendido y no se presentó ante América, en Quito, por una deuda de USD 30 000 con el arquero titular del equipo.

“Esperamos que los acreedores nos permitan extender los plazos. Estamos en conversaciones para ello”, aseguró Juan Serrano, presidente de la Comisión de Fútbol, en entrevista con la radio cuencana FM 88. Él se mostró confiado y espera se levante la suspensión para el juego de este sábado, desde las 17:30, válido por la fecha 28 de la LigaPro.

Se conoció que el monto de la deuda es de aproximadamente USD 160 000, cuyos acreedores son los argentinos Luis Soler, Máximo Villafañe y Adrián Navarro, integrantes del cuerpo técnico que fue separado a mediados de mayo pasado del plantel profesional por falta de resultados. Se suma un monto importante a Heras.

Ellos, en la fecha 27 de la LigaPro (jugada el 27 de septiembre en Cuenca), alargaron los plazos de pago de las deudas y permitieron que se jugara con Fuerza Amarilla. El club también adeuda a la Asociación de Fútbol del Azuay y a la Federación Deportiva del Azuay, entre otras instituciones.

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