¿La Liga que ‘juega feo’?
Twitter: @RoddMar
Lo admito. Yo también he coincidido en varias ocasiones con este cliché que parece repetirse cada semana entre hinchas de Liga de Quito y periodistas deportivos desde que Pablo Repetto asumió como DT de Liga de Quito a mediados de 2017: ‘La Liga juega feo’.
Hemos sido injustos con el entrenador uruguayo, que ha transformado un fútbol más vistoso que practicaba en Independiente del Valle por la efectividad y los títulos que ahora obtiene junto a un plantel albo consolidado.
Pablo Repetto está a pocos días de sumar una nueva proeza en su carrera. Está a un triunfo de ganar la primera fase del Campeonato con Liga de Quito y con otra victoria podría acabar como líder de un grupo de Copa Libertadores en el que tuvo rivales más poderosos en plantilla y presupuesto como River Plate y Sao Paulo.
El practicar un fútbol vistoso no perpetúa las victorias y los triunfos. No todos los entrenadores pretenden emular a la Naranja Mecánica o el FC Barcelona de Pep Guardiola. La Italia campeona de la Copa Mundial de Alemania 2006 o ejemplos más contemporáneos como el Real Madrid de José Mourinho o el Atlético de Madrid de Diego Simeone han hipotecado el fútbol atractivo por la solvencia y la efectividad en los resultados.
Para los hinchas de Liga de Quito esta realidad no debe resultarle distante. Durante la etapa más brillante del plantel azucena con Edgardo Bauza como DT el equipo tampoco practicaba un balompié vistoso. Incluso el histórico 'Patón' fue tildado de ‘ultradefensivo’ cuando ganó la Copa Libertadores con San Lorenzo en 2014 o fue nombrado entrenador de una convulsiva Argentina en el clasificatorio rumbo a la Copa Mundial de Rusia 2018.
No cabe duda que ese mismo fútbol pragmático ha llevado a Repetto a ser el mejor entrenador que ha tenido el club albo en la última década.
Recordemos que el uruguayo levantó a la ‘U’ de las posiciones de descenso a su llegada en 2017 y clasificó al intrascendente equipo armado por Gustavo Munúa a una Copa Sudamericana. A finales de ese mismo año emprendió la renovación: desvinculó al histórico Norberto Araujo y rechazó el fichaje de Claudio Bieler, quien ahora deambula en la Segunda División de Argentina.
En 2018, Repetto consagró a la Liga de Quito como campeón del fútbol ecuatoriano, después de ocho años sin títulos. En 2019 el rendimiento fue en mejoría: una nueva final en el Campeonato, un título en Copa Ecuador y la clasificación a unos cuartos de final de la Copa Libertadores, por primera vez en 11 años.
Más allá de las quejas infundadas, este año el plantel albo tiene uno de sus equipos más competitivos. Pese a la salida anticipada de Antonio Valencia, el plantel ha acertado en sus contrataciones extranjeras y el estadio Rodrigo Paz Delgado vuelve a ser un bastión de virtudes en las Copas y el torneo local.
Repetto ya ganó un título en la Supercopa y –pese a quedarse sin fútbol por cinco meses de pandemia del covid-19- mantiene a Liga en lo más alto de la tabla de la LigaPro y la Copa Libertadores. Dos frentes en los que ahora es puntero con un calendario intenso y con pocas rotaciones en su plantilla.
¿Puede de verdad jugar feo un club que ha ganado 14 de sus 19 partidos de la temporada? Yo ya no lo creo.
