Lo que otros callan por temor o timidez, aquí se lo dice sin anestesia. Es comentarista de fútbol de EL COMERCIO. Síguelo en Twitter: @guapodelabarra
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viernes 24 de julio 2020

¿Paúl Vélez tiene la capacidad de ser DT de la Tricolor?

Alejandro Ribadeneira

Es indiscutible: de todos los entrenadores ecuatorianos, Paúl Vélez es el que mejor luce para asumir el mando de la Tricolor. Capacidad no le falta. Pero estamos hablando de fútbol, un mundo en que no basta la preparación para triunfar sino que hacen falta algunos otros parámetros para obtener el éxito.


Vamos por partes:

1. Los ecuatorianos no triunfan en la Tricolor… ¿o sí?
Con los entrenadores nacidos en el país pasa un fenómeno curioso: habitualmente despreciados, cada cierto tiempo resurge un sentimiento chauvinista que proclama que “ya es hora” de que un ecuatoriano sea DT de la Tricolor. ¿Cómo les fue los DT de los últimos 21 años? Carlos Sevilla, que heredó el cargo del colombiano Pacho Maturana, fue nombrado luego de que Luis Chiriboga ganó la presidencia de la FEF prometiendo un entrenador nacional en la Tri. Sevilla falló en la Copa América de 1999 y no logró evitar que lo reemplazaran ipso facto por el ‘Bolillo’.

Sixto Vizuete llegó al equipo en el 2007 sin haber dirigido un solo cotejo en Primera y ese capricho del chiriboguismo, trepado en la ola chauvinista de turno, causó que los jugadores tomaran el control del camerino, impusieran los cambios y hasta gritaran al entrenador en pleno partido, para finalmente fracasar en las eliminatorias. El problema real, en el caso de Vizuete, estaba en que su experiencia no era la adecuada, porque el oro panamericano que ganó, relativamente valioso, no lo convertía mágicamente en un estratega calificado para vencer a Brasil, Argentina y Uruguay en eliminatorias. En el caso de Sevilla, no se le dio tiempo para trabajar en su proyecto y se lo juzgó por tres cotejos de un torneo corto. En otras palabras, ser ecuatoriano no fue el problema real, sino que ciertas condiciones no estaban dadas para el éxito de cada uno.

2. ¿La experiencia de Vélez será suficiente?
El cuencano exhibe mucha más trayectoria que la de Vizuete cuando llegó a la Tricolor; ha dirigido en Primera, ha ganado dos veces la Serie B y estuvo cerca de ser campeón de la Serie A. Bordeando de los 50 años, tiene la edad justa para asumir una selección y posee reputación ganada en cada temporada, no en un hervor mediático. El problema para muchos es que, pese a sus cualidades, no ha adquirido los galones de los títulos. Es verdad que los títulos pesan, pero también es verdad que muchos entrenadores asumieron selecciones sin haber sido campeones en clubes y les fue muy bien, como Joachim Löw, mientras que un asiduo cosechador de trofeos como Sven-Göran Eriksson fracasó estrepitosamente en dos selecciones. Todo depende de cómo el entrenador maneje el camerino e imponga su filosofía para ganarse el respeto de los jugadores, incluso en las derrotas.


3. Una Federación desestabilizada
Aunque la pregunta debiera ser: ¿Vélez podrá adecuarse a los lineamientos de esta Ecuafútbol? ¿Habrá estabilidad? Porque, antes que elegir un nombre y ofrecerle un contrato, los dirigentes primero deben llegar a un acuerdo sobre el entrenador y garantizarle un margen de maniobra (dadas las circunstancia descritas en el punto 3) y un tiempo. La meta razonable debería ser la defensa de los puntos en casa. Dada la guerra civil que vive la Federación por el pretexto del DT, es necesario ese pacto para blindar a Vélez, o al elegido, de las consecuencias de las pugnas.

4. ¿Partir desde cero?
Debido a la pandemia mundial, todos los equipos nacionales dejaron de entrenarse y muchas estrellas perdieron continuidad. A Vélez, si lo eligen, le tocará liderar un proceso, no desde cero, pero sí desde una posición de desventaja poco habitual. Por ejemplo, los seleccionados argentinos ya tuvieron actividad en Europa. Los ecuatorianos en Europa son poquitos y los 22 que militan en clubes de México recién están activándose. Los legionarios que sean llamados necesariamente deberán juntarse con los que están en la LigaPro que, al juzgar por el amistoso entre BSC y Guayaquil City, están absolutamente fuera de forma. Nunca antes todos los jugadores de la Serie A pararon tanto tiempo (140 días) simultáneamente. Vélez tendrá la misión de inventarse un equipo nacional que sea competitivo después de la pandemia, nada menos.

Paúl Vélez, DT de Macará. Foto: BENDITO FÚTBOL

Paúl Vélez, DT de Macará. Foto: BENDITO FÚTBOL