Lo que otros callan por temor o timidez, aquí se lo dice sin anestesia. Es comentarista de fútbol de EL COMERCIO. Síguelo en Twitter: @guapodelabarra
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miércoles 04 de marzo 2020

Independiente demuestra ante BSC la fuerza de su proceso

Alejandro Ribadeneira

La paliza (sí, la paliza) que Independiente del Valle le aplicó a Barcelona SC en el Monumental es la primera gran derrota deportiva desde que Carlos Alejandro Alfaro Moreno preside al ídolo. Hasta ahora, y pese al inusual cargamontón que sufrió Alfaro en lo administrativo, todo parecía ir bien en cuanto a los resultados, sobre todo con el acceso a la fase de grupos de la Copa Libertadores. Había dinerito extra, había euforia a prueba de corona virus y planes de grandeza.


Independiente del Valle aplicó, con claridad y crueldad, un aterrizaje forzoso al entrenador de los canarios, Fabián Bustos, quien quiso sorprender al equipo de Sangolquí con un esquema inédito, con doble lateral y Fidel Martínez de 9 (raro, porque ‘Alegría y Atrevimiento’ rinde mucho más por la banda, como lo demuestra su poder ofensivo). Pero el sorprendido fue Barcelona, pasado por encima desde el primer minuto. Esto pudo haber acabado con un marcador más amplio.

Bustos prefirió que sus jugadores mostraran cautela durante los primeros 45 minutos para luego atacar en la segunda parte. Sabía que Independiente, con más físico y oficio, podía responder con peligro. Pero la diferencia estuvo en la circulación de la pelota de los pupilos de Miguel Ramírez, con una alta eficacia que desbarató al cuadro amarillo. No por nada IDV ha construido el equipo ecuatoriano más competitivo del momento.


Bustos tiene como coartada que Jonatan Álvez no estaba disponible (y, sin querer, ha quedado demostrado la enorme importancia que tiene el uruguayo en Barcelona). Pero también queda claro que tampoco existe mucho más para revertir este durísimo golpe al entusiasmo. Independiente era el rival a vencer, sí o sí, si se quería mantener vivo el objetivo de avanzar muy lejos en la Copa, una obsesión tras dos finales perdidas.
Ahora, de un manotazo, duelen muchísimo los puntos cedidos ante Liga de Portoviejo y Técnico Universitario, en la Liga Pro, por dar descanso a los titulares. Ya no cuentan las goleadas a Cerro ni tener al artillero de la Copa. Todo se volvió oscuro y empinado. Bustos, siempre bajo sospecha de ser un DT de equipo 'chico', deberá visitar a LDU en la Casa Blanca y luego jugar con Flamengo.

Si antes de todos modos se veía difícil la campaña de este año, ahora todo es abrumador. Ya queda claro que el combustible de Díaz no es para todos los partidos. Es evidente que Pineida y Aymar tienen una vocación dañina, que Alemán no es determinante cuando entra al cambio y, sobre todo, que falta mucho tiempo para que Bustos logre consolidar un estilo y un proceso, no como el de Independiente, que lleva diez años de permanente apuesta por una filosofía, pero sí uno razonablemente digno.

Jugadores de Independiente del Valle festejan uno de los goles marcados a Barcelona,por la Libertadores. Foto: EFE

Jugadores de Independiente del Valle festejan uno de los goles marcados a Barcelona, por la Copa Libertadores. Foto: EFE