¿Dónde están ahora los amigos? Los festejos…Los viajes en “chárter”, la sonrisa, el abrazo, el discurso ganador y siempre optimista…

Con las disculpas del caso a los protagonistas… Pero luego de ver la fecha de las eliminatorias sudamericanas, con el retorno del insufrible Lio Messi, tras los videos de los guaguas pidiéndole que no se vaya, la estatua que develaron con su figura, los ruegos del presidente Macri (solo faltó el Papa Francisco) solicitándole que revea su decisión… ¡Hasta que se dio! Ávido estuve por más fútbol y su puesta en la escena marquetera…

Empieza a parecer terquedad: los mismos nombre, los mismos (escasos) recursos y las mismas variantes, las mismas. Dijo un tal Einstein que “quien repite las mismas fórmulas esperando un resultado distinto, está loco”.

Miré por televisión la final de la Libertadores, como la mayoría de los partidos de este Independiente del Valle, el de “las sorpresas”, el “tumba gigantes”, el que incluso a pesar de denostar un principio solidario digno de imitar y aplaudir –fuera y dentro de la cancha-, se ha ganado enemigos, antagonistas que han tratado de echar tierra sobre lo que ha conseguido, so pretexto de ser “un equipo sin hinchada” o de “la suerte” con la que ha contado.

Podría sonar a la versión criolla del “No voy en tren, voy en avión”, el tema de Charly García, como una habitual demostración de rebeldía, patrimonio del bigote bicolor más famoso de Argentina…

Uno de “los líderes” indiscutibles de la selección ecuatoriana de fútbol es el volante Cristhian Noboa. Lo pongo entre comillas ya que varios de sus compañeros así considerados, no han ejercido efectivamente aquel atributo; sobre todo por una característica que los líderes deben tener y es lo que les falta: la autocrítica.

“Idiotas, detractores del fútbol de su país, perdedores” entre otras cosas somos quienes nos preguntamos dónde está la selección del inicio de las eliminatorias, según el Director Técnico de la selección ecuatoriana de fútbol, Gustavo Quinteros.

¡Un record! ¿Cómo no recibirlo con beneplácito? Y es que un resultado como el 44-1 de Pelileo a IndiNative no se ha visto en el fútbol profesional en todos sus registros históricos. Anécdota parecida y no menos ridícula le pertenece al AS Adema, un cuadro de Madagascar, que en el 2012 le ganó por 149 goles a 0 al SO l'EmyrneAntanarativo. Sin embargo este último fue sancionado, ya que los goles fueron convertidos por sus jugadores en su propio arco como símbolo de protesta por un arbitraje vergonzoso.