El fútbol y el periodismo se convirtieron en la mejor adicción para hallar rumbo en la vida. Querendón de la radio (medio de comunicación donde me inicié), hallé en la prensa un espacio tan grande, como la cancha de fútbol misma, para vivir divertido. Encontrar la quinta pata en un deporte donde se razona más con el corazón y los sentimientos es entretenido. Vivo abriendo frentes por cuestionar todo y estoy convencido que hay que caminar en silencio, pero haciendo ruido. Twitter: @maobayas
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sabado 27 de mayo 2017

El Ecuador de Gustavo Quinteros y la Venezuela de Dudamel no se parecen en nada

Mauricio Bayas

Dos escenas para entender la realidad. La primera: En el estadio del Aucas, en febrero del 2017, Rafael Dudamel se abraza, bromea y se mezcla con los seleccionados Sub 20 de Venezuela. Dudamel, el exgolero, conoce cada una de las historias de sus futbolistas. Empezó a trabajar en la Sub 17 en el 2013, luego de dos años pasó a la Sub 20. El DT de la Selección mayor de la ‘Vintotino’ fue como un padre para la mayoría de seleccionados mundialistas que participan y se destacan en Corea.


Segunda escena necesaria de contar. Ocurrió en enero de este año, en Riobamba. Gustavo Quinteros, el DT de la Selección ecuatoriana llegó a almorzar en la concentración de la Sub 20. Para la mayoría de seleccionados fue la primera vez que conocían al entrenador. Aunque la base de la selección mundialista que participa en Corea lleva dos años trabajando junta, recién Quinteros les daba mano a muchos de ellos y se enteraba algo de sus trayectorias.


Hay enormes diferencias entre las selecciones Sub 20 de Ecuador y Venezuela. La primera clasificó por el esfuerzo aislado de sus jugadores y del cuerpo técnico de Javier Rodríguez. En la Federación Ecuatoriana se habla y se usa tanto la desgastada palabra ‘proceso’, pero eso no hay. No existe. Todo está desarticulado. Recién se fortaleció la Comisión de Selecciones y no hay ningún seguimiento técnico a talentos juveniles. ¿Pruebas? Los supuestos casos de futbolistas con edades adulteradas no fueron bien investigados. Todo fue un saludo a la bandera y humo mediático.


En cambio, la segunda, la ‘Vinotinto’ trazó un plan. Una guía desde las bases. A Dudamel tuve la oportunidad de preguntarle si tenía plazos y creo que es necesario desempolvar su respuesta. “Los tiempos que requiere cada categoría. Lo importante es que hemos empezado desde la Sub 15, la 17, la 20. Muchos de estos jugadores Sub 20, varios, nos han acompañado en la Selección absoluta. Fariñez ya tiene dos Copas América. Soteldo ya debutó contra Colombia. Yangel Herrera debutó contra Brasil. La manera como van aprendiendo es llenándose de experiencia”, dijo. Acá todavía se sufre porque no hay reemplazo para Walter Ayoví.


Un detalle más. Los presupuestos de Ecuador y de Venezuela son muy distintos. Solo por referencia. El año pasado se reportó que Dudamel ganaba cerca de USD 350 000 al año. Enorme diferencia con el sueldo de Quinteros. No es culpa del DT de la Tricolor, ni de Javier Rodríguez. Es culpa de un sistema sin estructura, disperso. Sí la selección mayor no tiene una identidad de juego clara, peor las formativas. Duele decirlo, pero es a lo que salga. Jugamos como podemos. Sí ganamos, ganamos todos. Pero sí perdemos, es culpa de los seleccionados, de la convocatoria, del técnico.


Lo de Venezuela, por donde se mire es destacable. Lo de Ecuador no. Es parte de un resultado más apuntando al momento no a la estructura, que no recién se piensa en una cabeza. Es verdad que Venezuela no ha clasificado a un mundial. Sin embargo, están dando buenos pasos. En Ecuador todavía se cree que con el ‘sí se puede’ se a van a alcanzar resultados.