Indignado 2
Triste 0
Contento 0
jueves 09 de junio 2016

La mirada del 'Toño'

Jorge Cruz

Corrían algo así como 23 minutos del partido Ecuador-Perú y con dos goles en contra, todo era un caos para la Tri: las pelotas divididas eran ajenas, todo centro estaba anticipado y después de cada segundo pase, la pelota volvía al contrario…


Una de las cámaras enfocó a Antonio Valencia cuando el balón se perdía hacia un lateral peruano; tenía la mirada desenfocada, observaba a todos lados, como repasando mentalmente los errores, como preguntándose cómo el orden que mostraron ante Brasil se cayó tan fácil.

Y es que los ojos del Toño tienen tanta importancia como su velocidad, sus centros y su entrega. Uno puede mirar un partido de la Selección y leerlo a través de la mirada de Valencia. Si la vista de Antonio luce perdida y desconcertada el grupo de alguna manera estará así… viendo a todos lados, sin concentrarse y con dudas…

Sus mismos ojos lograron revertir todo, miró claro cómo Énner podía picar a las espaldas y buscó un espacio para su primera asistencia de la Copa. La visión del Toño transformó el partido al final del primer tiempo, sin ese panorama otra hubiese sido la historia.

En el segundo tiempo, los ojos del Toño se olvidaron de las gradas y de los dos goles peruanos, se concentraron solo en la pelota. Lo convirtieron en un perro de caza en la defensa y en una torre de control en el ataque. Su mirada, cuando se apareció nuevamente en la pantalla era otra: pendiente de la pelota, mirando por dónde podía venía el ataque peruano, por dónde correr, a quién asistir…

El empate frente a Perú fue el resultado de muchas variables y aportes, pero la forma en la que Valencia afronta un partido, la manera en la que lo ve, pudo cambiarle la historia al resultado. Esperemos que los ojos del Toño estén claros contra Haití, es más ojalá, puedan ver más allá, ojalá tengan la mira en los cuartos de final, ojalá podamos mirar a través de ellos y volver -casi 20 años después- a esa fase de la Copa América.