El Monumental volvió a ser 'el coloso de América'
El 2016 fue un año de gloria para Barcelona SC. El cuadro torero era campeón del torneo ecuatoriano, tenía un plantel competitivo para las copas internacionales y había arreglado con la mayor parte de sus acreedores por las deudas atrasadas. Pero todavía quedaba un pendiente con la hinchada amarilla: el Monumental lucía deteriorado y envejecido, con el techo oxidado y las paredes pintadas con grafitis.
Durante 29 años, el estadio fue la joya más preciada de los seguidores por ser la casa del club en los momentos históricos como las finales de la Copa Libertadores o las vueltas olímpicas de los seis títulos que celebro en su propio escenario.
Sin embargo, el tiempo no perdonó la falta de mantenimiento del ‘Coloso de América’. Los graderíos de las Generales lucían sucios y despintados. No había butacas en las Tribunas, mucho menos una zona VIP, como en los grandes escenarios de América como La Bombonera o Arena do Gremio de su próximo rival en la semifinal de la Copa Libertadores.
Por ese motivo, la directiva del elenco ‘canario’ trabajó para darles a los hinchas, socios y jugadores la casa que se merecen. Hoy es un nuevo Monumental, que aunque no llegue todavía al nivel del estadio semi-europeo de sus vecinos azules, ya tiene las comodidades que ni siquiera el mundialista y casi obsoleto estadio Olímpico Atahualpa puede presumir.
Carol Rugel es uno de los rostros en la transformación del estadio guayaquileño, que ahora también presume de un palco tipo sala VIP, como si fuera la mejor sala de cine para ver al ídolo con lujos y comodidades.
Rugel preside la Comisión del Estadio Barcelona y con el apoyo de la directiva y algunas empresas privadas ha logrado mejorar las instalaciones del escenario. La idea es que hasta el 2019 todo el estadio tenga butacas numeradas e incluso instalar un techo cubierto en las Generales. Estas obras se realizarán a riesgo de que el estadio pueda perder una parte de su capacidad, que actualmente puede albergar a 57 267 espectadores.
El techo fue la prioridad de la directiva. Las láminas que cubrían el recinto estaban recubiertas de óxido y fueron reforzadas con nuevas planchas de metal, que soportan la humedad y tendrán 30 años de duración.
A finales del año anterior se instalaron 16 000 butacas, que se estrenaron en la ‘Noche Amarilla’. No todo estuvo a cargo de la directiva. Los propios seguidores del club también decidieron colaborar con su ‘casa’ a través de una convocatoria en redes sociales.
En junio del 2017, los aficionados se reunieron voluntariamente para pintar los graderíos de las Generales, que pasaron de un color grisáceo como la roca a un amarillo intenso como el sol. Ambas localidades ahora llevan el escudo impreso cuando las barras acuden al Monumental.
“Sin juzgar a nadie, no hicieron bien las cosas. Barcelona es una marca y si hubiera sido bien administrada imagina cómo lo hubiera cogido esta directiva. Cuantos campeonatos dejamos de ganar por una mala administración”, asegura Rugel.
Para este miércoles 25 de octubre, los ‘canarios’ tendrán otra novedad. El Monumental estrenará la primera parte de 126 butacas VIP, con asientos acolchados y reclinables. 50 de ellas serán obsequiadas a los verdaderos ídolos que hicieron historia con el club ‘canario' y el resto serán entregadas a los socios que estén dispuestos a pagar USD 990 al año por la exclusividad de ver los partidos con comodidad y atención personalizada.
